Kitty Green — “Hotel Royal es otra forma diferente de ver la violencia de género”
La segunda película de ficción tras The Assistant es una mezcla explosiva de géneros que contrasta con su gélida y minimalista ópera prima.
Después de The Assistant, un retrato certero del #MeToo, la directora presenta otro inquietante relato feminista, esta vez situado en un bar de mala muerte de la Australia profunda, frecuentado casi siempre por hombres borrachos, en el que va desplegando un mosaico de lo que es la masculinidad tóxica en un entorno de amenaza constante. Si en su anterior obra ponía al descubierto las estructuras de poder que permitieron la existencia de un depredador como Harvey Weinstein, aquí pone el foco en la cultura del alcohol. La película de la cineasta australiana compitió en la sección oficial del último Festival de San Sebastián.