Crítica — Trenque Lauquen: Si Laura no quiere que la encuentren, sus razones tendrá
Laura Citarella desborda la narració en aquest film situacionista, feminista i epistolar.
Trenque Lauquen
Año 2022
País Argentina
Dirección Laura Citarella
Guion
Laura Citarella
Laura Paredes
Producción
El Pampero Cine
Grandfilm
Reparto
Laura Paredes
Ezequiel Pierri
Rafael Spregelburd
Elisa Carricajo
Juliana Muras
Verónica Llinás
Cecilia Rainero
Rodrigo Paredes
Fotografía Agustín Mendilaharzu
Montaje
Miguel de Zuviria
Alejo Moguillansky
Música Gabriel Chwojnik
Distribución
Vitrine Films
Filmin
Duración 250 min
Fecha de estreno 9 de junio de 2023
Sinopsis
Una mujer desaparece. Dos hombres salen en su busca: ambos la aman. ¿Por qué se fue? Cada uno de ellos tiene su propia sospecha, y la oculta al otro. Ninguno tiene razón, pero ¿alguien la tiene?
Trenque Lauquen
Año 2022
País Argentina
Dirección Laura Citarella
Guion
Laura Citarella
Laura Paredes
Producción
El Pampero Cine
Grandfilm
Reparto
Laura Paredes
Ezequiel Pierri
Rafael Spregelburd
Elisa Carricajo
Juliana Muras
Verónica Llinás
Cecilia Rainero
Rodrigo Paredes
Fotografía Agustín Mendilaharzu
Montaje
Miguel de Zuviria
Alejo Moguillansky
Música Gabriel Chwojnik
Distribución
Vitrine Films
Filmin
Duración 250 min
Fecha de estreno 9 de junio de 2023
Sinopsis
Una mujer desaparece. Dos hombres salen en su busca: ambos la aman. ¿Por qué se fue? Cada uno de ellos tiene su propia sospecha, y la oculta al otro. Ninguno tiene razón, pero ¿alguien la tiene?
Rafa y Ezequiel buscan a Laura. Ninguno de los dos sabe dónde está ni por qué ha desaparecido. Son su novio y su compañero de trabajo, respectivamente. El primero es verborreico y un tanto prepotente, el segundo, cabizbajo y taciturno. Como una suerte de particular e involuntario dúo cómico, recorren la Argentina profunda en busca de pistas que les lleven hasta Laura. Lo que no saben es que quizás Laura prefiere que no la encuentren. Laura ha desaparecido, como Anna, la protagonista del sexto largometraje de Antonioni. No en vano, el título del primer capítulo de Trenque Lauquen es «La aventura».
En el año 2002 se constituyó El Pampero Cine, un grupo de cineastas dispuestos a experimentar y a dinamitar los métodos clásicos utilizados en la industria cinematográfica argentina. Un grupo de amigos que llevan ya más de veinte años haciendo películas juntos, que constantemente intercambian sus roles, que reivindican un cine diferente, más artesanal y al amparo de lo que se dio en llamar nuevo cine argentino.
Un grupo, en definitiva, que ha sido capaz de crear un universo propio y reconocible. Este grupo está conformado por Mariano Llinás, Agustín Mendilaharzu, Alejo Moguilansky y Laura Citarella. Es esta última quien firma Trenque Lauquen, monumental película de más de cuatro horas de duración protagonizada por un personaje llamado Laura que es interpretado a su vez por otra actriz llamada Laura (Paredes). Pero esta Laura –personaje– no aparece de la nada, no. Esta Laura –personaje– es la misma protagonista que la de Ostende, filme anterior de Citarella, cuyo proyecto secreto –o quizás, no tanto– consiste en crear una saga en la que un mismo personaje viva distintas vidas en diferentes ciudades argentinas. De momento ya van dos, esperemos que sean muchas más.
Como Historias extraordinarias o La Flor (películas dirigidas por Mariano Llinás en 2008 y 2018, respectivamente), Trenque Lauquen es un film desbordante, y no sólo en lo que a duración se refiere, porque Trenque Lauquen no contiene una historia, sino muchas. En Trenque Lauquen las narrativas se suceden y se superponen, el placer de narrar de sus protagonistas provoca en el espectador un placer equiparable al escuchar, atender, intentar averiguar la verdad; aunque en realidad eso no sea importante para la historia, para las historias.
«TRENQUE LAUQUEN ES UNA HISTORIA DE FICCIÓN, PERO EN ELLA LA REALIDAD SE FILTRA A BORBOTONES»
El tercer filme en solitario de Citarella transita con habilidad y sin complejos por los distintos géneros: lo que empieza como una road movie de misterio se acerca progresivamente al cine romántico epistolar para, finalmente, virar hacia el cine fantástico de toques lynchianos. Cartas de amor secretas, lagunas misteriosas, criaturas sin identificar, canciones que funcionan como metáforas y, sobre todo, mujeres emancipadas. Todos estos elementos tienen cabida en un film como Trenque Lauquen, una obra capaz de fascinar como un caleidoscopio al que damos vueltas sin cesar, asombrados por cómo una sencilla combinación de elementos puede dar lugar a imágenes tan bellas.
Trenque Lauquen es una historia de ficción, en efecto, pero en ella la realidad se filtra a borbotones. Por eso Citarella decidió ubicar el film en la ciudad de su familia, por eso los personajes (Laura, Rafa, Ezequiel…) se llaman igual que los actores. Estructurada en dos partes de seis capítulos cada una, la película adopta los puntos de vista de los distintos personajes (Rafa, Ezequiel, Juliana, Elisa Esperanza, Laura…), pero siempre con un único fin: conocer a Laura, saber cuáles son sus motivaciones, sus razones para desaparecer, saber qué cosas son las que la conmueven, las que la mueven a actuar como actúa. Porque, cuando parecía que todo en su vida estaba ya armado –a punto de licenciarse como bióloga, de irse a vivir con su novio Rafa, de empezar su nueva vida–, Laura decide que no, que es mejor desaparecer sin dejar rastro. O, mejor dicho, dejando un rastro un poco difuso, encabezado por una nota que, en un velado homenaje a Violeta Parra, dice tan solo: «Adiós, adiós. Me voy, me voy». Y es que, a Laura, en los últimos meses, le han pasado muchas cosas. Ha descubierto fascinada la correspondencia secreta entre Carmen Zuna y Paolo Bertino, ha leído Biografía de una mujer sexualmente emancipada de Aleksandra Kolontái y, a lo mejor, sólo tal vez, se ha enamorado un poquito. Acontecimientos más que suficientes como para hacer que se replantee su vida.
Trenque Lauquen no conté una història, sinó moltes.