FILMS

Crítica — Sangre en los labios: violento pálpito del deseo

Rose Glass nos desafía, provoca y seduce con su segundo largometraje, un violento y cautivador romance lésbico situado en un pequeño pueblo de Nuevo México. La pasión entre Lou y Jackie, la responsable del gimnasio local y una recién llegada culturista, es el desencadenante de una explosión de sangre, lejía y anabolizantes.

Elena del Olmo

Sangre en los labios

Año 2024

País Regne Unit i Estats Units

Dirección Rose Glass

Guion Rose Glass i Weronika Tofilska

Producción Andrea Cornwell i Olivier Kassman

Reparto Kristen Stewart, Katy O’Brian, Anna Baryshnikov, Jena Malone, Ed Harris, Dave Franco

Fotografía Ben Fordesman

Montaje Mark Towns

Música Clint Mansell

Distribución Filmin i Avalon

Duración 104 minuts

Fecha de estreno 12 d'abril de 2024

Sinopsis

El romance entre Lou, la solitaria gerente del gimnasio local, y Jackie, una aspirante a culturista, desencadena una ola de violencia, muerte y persecución en un pequeño pueblo de Nuevo México.

Sangre en los labios

Año 2024

País Regne Unit i Estats Units

Dirección Rose Glass

Guion Rose Glass i Weronika Tofilska

Producción Andrea Cornwell i Olivier Kassman

Reparto Kristen Stewart, Katy O’Brian, Anna Baryshnikov, Jena Malone, Ed Harris, Dave Franco

Fotografía Ben Fordesman

Montaje Mark Towns

Música Clint Mansell

Distribución Filmin i Avalon

Duración 104 minuts

Fecha de estreno 12 d'abril de 2024

Sinopsis

El romance entre Lou, la solitaria gerente del gimnasio local, y Jackie, una aspirante a culturista, desencadena una ola de violencia, muerte y persecución en un pequeño pueblo de Nuevo México.

Macho sluts, una antología erótica de relatos queer, descansa en la mano de Lou mientras se fuma un cigarrillo. Publicada en 1988, la autoría es de Patrick Califia, hombre bisexual transgénero que, por entonces, se identificaba como lesbiana. En los años anteriores, el movimiento antipornográfico feminista de Andrea Dworkin batallaba contra el movimiento lésbico sadomasoquista, mientras Califia imaginaba la existencia de un universo en el que etiquetas como top y bottom, hombre y mujer o gay y heterosexual eran transgredidas. La presencia del libro acentúa la curiosidad de Lou ante el panorama queer que se amplifica más allá de los límites de su pequeño pueblo. Al igual que Jackie entrena férreamente para el certamen de culturismo, la lectura implica la formación activa en la identidad lésbica de Lou.

Rose Glass subvierte el rol esperado para Lou (Kristen Stewart) que, ante la evidente diferencia física con Jackie (Katy O’Brian), asume la posición dominante desde que, antes de cualquier roce, ordena a la culturista que se dé la vuelta para administrarle la primera inyección de unos adictivos y extraordinarios anabolizantes. Lou, cuyo trabajo es desatascar los desbordantes lavabos del gimnasio y soportar a los clientes que los frecuentan, encuentra placer en tener el control (en lo sexual, en lo romántico o en limpiar los restos de carne, dientes y sangre de las paredes de su apartamento). Jackie, cuyo físico imponente le concede seguridad y protección, encuentra placer en cederle el poder a Lou, descubriendo en la intimidad una vulnerabilidad de la que nunca ha sido dueña. El consentimiento del que nace el erotismo se mide en la posesión o la entrega del poder, independientemente de la potencia física, como explicaba Stewart en una entrevista para Nerdist: «El sexo queer no siempre tiene que ver necesariamente con lo físico. Son las historias que nos contamos unos a otros, las historias que nos contamos a nosotros mismos, las fantasías que tenemos, lo que queremos sentir. Y si compartes ese sentimiento, entonces es real. Puedo ser grande. Puedo ser tan grande como quiera, aunque mida 1,70 y pese menos que ella».

 

SANGRE EN LOS LABIOS JUEGA CON EL PODER, FÍSICO Y SIMBÓLICO, EN UN EJERCICIO QUE TRANSFORMA LA REALIDAD Y, CON VALENTÍA, PERMITE QUE LAS LESBIANAS SE COBREN SU VENGANZA A LA VEZ QUE, ENTRE ELLAS, MUESTRAN EL MÁS DELICADO DE LOS AFECTOS O EL MÁS BRUSCO DE LOS ROCES.

Sangre en los labios desafía con un póster de explotación en el que el musculoso brazo izquierdo de O’Brian equilibra su cuerpo mientras el derecho sujeta una pistola en el aire. Glass abraza el erotismo que se aleja de los cánones heteronormativos y entra sin temor en un terreno fetichista macrofilo, acercándose al músculo contraído por el peso de las máquinas del Gimnasio Cráter o bajo las hábiles manos de Lou, recorriendo el cuerpo de Jackie antes de separar sus piernas. Las relaciones de poder son la base de estos lazos ardientes: las agresiones a la hermana de Lou, la mirada inquisidora de un padre homicida o el chantaje de Daisy, cuya aura infantil, con los dientes carcomidos por el exceso de azúcar, contrasta con las relaciones sexuales a la fuerza que mantiene con una subyugada Lou. La ultraviolencia habita a los personajes, en un mundo sórdido, sombrío y sucio en el que el estropajo y la lejía solo rascan las manchas de sangre reseca de la pared y la comida rezuma grasa, nata y sirope. 

Las minorías maltratadas dan rienda suelta a una fantasiosa agresividad sanguinaria que se aleja a conciencia de la moralidad y rompe mandíbulas, destroza tráqueas y sueña con aplastar al padre de su novia. El horror lascivo de los espasmos y los jadeos ahogados de Saint Maud, síntomas de una ambigua posesión divina, continúan cuando los esteroides ensanchan los músculos de Jackie a la vez que un grotesco sonido de desgarro nos hace revolvernos en la butaca. Las imágenes irreales y alegóricas cuestionan la realidad y muestran una dimensión onírica que revela una particular percepción de los acontecimientos: Jackie vomita la culpa ante los jueces del ansiado certamen de culturismo o se transforma, fuera de toda lógica física, en una figura mitológica caída del cielo, salvadora, ante los aullidos de dolor de Lou. 

Sangre en los labios juega con el poder, físico y simbólico, en un ejercicio que transforma la realidad y, con valentía, permite que las lesbianas se cobren su venganza a la vez que, entre ellas, muestran el más delicado de los afectos o el más brusco de los roces. Stewart, que con Lou continúa la resignificación de su carrera, y O’Brian, que encarna a Jackie gracias a una foto en redes sociales, mantienen, cada una, una relación lésbica fuera del set de rodaje, amplificando la autenticidad de las escenas que comparten, en una equidad de conocimiento, que, aunque no necesario para interpretar, no puede ser replicado. Glass abandona las expectativas atadas al binarismo, al físico y al propio realismo narrativo, y dota a sus protagonistas de una voluntad para crear y ser dentro de una relación construida sobre los cadáveres de aquellos que las llamaron «monstruos».

CRÍTICA DIRECTORAS PELÍCULA Rose Glass

TAMBIÉN TE PUEDE INTERESAR...

FILMORRETRATOS

Věra Chytilová

"Una margarita en un mundo gris"

La distribuidora independiente Atalante estrena en una versión restaurada en 4K Las margaritas, el film manifiesto de la cineasta checa Věra Chytilová, uno de los títulos fundamentales del cine de...

FILMS

Crítica

"Bird: Querer volar"

El nuevo film de la directora británica Andrea Arnold mezcla realismo social de extrarradio con elementos mágicos.

ENTREVISTAS

Sandra Romero

"¿Quedarse o irse?"

Desde que ‘Por donde pasa el silencio’, ópera prima de la sevillana Sandra Romero, se estrenó en la sección Nuevos Directores del Festival de San Sebastián, el film ha estado...

FESTIVALES

FICX

"62a edición: Fronteras entre lo real y lo imaginado"

El Festival Internacional de Cine de Gijón vuelve a apostar por la diversidad en su 62.ª edición, que tuvo lugar del 15 al 23 de noviembre, donde destacó la presencia...

FILMS

Crítica

"Las Margaritas: Un manifiesto sobre el desorden como acción subversiva"

Una película que rompe la linealidad del relato y se rebela contra todo el orden establecido.

FILMS

Crítica

"Una familia: Las palabras justas"

La novelista Christine Angot debuta como cineasta con este documental autobiográfico en el que vuelve a abordar el tema central de su obra: el incesto. Se estrena en Filmin.

FILMS

Crítica

"Bread & Roses: Pan, Trabajo y Libertad"

Hacen falta testimonios como 'Bread & Roses', que nos recuerden que en el mundo aun hay muchas mujeres sin ningún derecho. La ligera sensación de que las cosas podían cambiar...

ENTREVISTAS

Isabel Herguera

"Animando sueños"

La 31.ª edición de L’Alternativa, Festival de Cinema Independent de Barcelona, que se celebra entre el 14 y el 24 de noviembre, dedica una de sus sesiones satélites a la...

ENTREVISTAS

Joanna Pardos

"El testimonio como arma"

"El fútbol era una realidad que desconocía y que me interesaba poco, pero cuando conocí la historia de ellas, le encontré un sentido, porque era un espacio muy masculinizado que...

FILMS

Crítica

"El baño del diablo: Almas atormentadas pretendiendo evitar la condena eterna"

El cuarto film de Veronika Franz y Severin Fiala nos sumerge en unos aterradores hechos sucedidos en varios países de la Europa de los siglos XVII y XVIII.

  • enlace copiado

Si quieres seguir leyendo te tienes que suscribir

¡Únete a la comunidad Filmtopia para poder seguir dándote lo mejor del cine hecho por mujeres y ofrecerte nuevos contenidos y actividades!

¡Elige una de estas tres opciones!

suscripción mensual

4,99€

al mes

  • Acceso ilimitado a todos los contenidos escritos y en vídeo

SUSCRÍBETE

suscripción anual

49€

al año

  • Acceso ilimitado a todos los contenidos escritos y en vídeo

SUSCRÍBETE

suscripción FAN CLUB

99€

al año

  • Acceso ilimitado a todos los contenidos

  • Acceso a sorteos de posters, libros, entradas, etc.

  • 1 entrada gratis al año para asistir a una mesa redonda o a una clase magistral sobre cine hecho por mujeres

  • 1 entrada gratis al año para asistir a un estreno de una película dirigida por una mujer

  • 1 camiseta de Filmtopia

  • (Oferta válida solo en España)

SUSCRÍBETE